En el mundo de la moda, hay nombres que simplemente saltan a la mente cuando se piensa en estilo y elegancia, entre los que se encuentran Louis Vuitton, Gucci, Chanel, Balenciaga, Hermès y, por supuesto, Paco Rabbane. El veterano franco-español dejó marcado su nombre no solo conocido en las pasarelas, sino también en el imaginario colectivo como uno de los diseñadores de moda más influyentes del siglo pasado y de la primera década de los 2000. Sin embargo, el empresario y diseñador falleció este 3 de febrero, en su casa de Portsall en Finisterre, Francia.
Considerado por reconocidas figuras en el mundo de la moda como un “preeminente innovador” y “una eminencia en su campo”, Francisco Rabaneda y Cuervo pasó a mejor vida a sus 88 años, dejando detrás de sí un legado de diseños controversiales, estilo de hacer negocios y, en general, un imperio de la moda que rivaliza con los mejores del ramo desde hace más de medio siglo. Un gigante en el ramo del millonario negocio de fashion que siente fuertemente la ausencia de la leyenda que muchos de sus colegas lamentan.
Humildes comienzos: Los arquitectos perdieron a un “genial modista”
Rabanne fue hijo de la costurera en jefe de nada más y nada menos que del diseñador Cristóbal Balenciaga Eizaguirre (quien falleció en marzo 23 de 1972), mientras que su padre fue un coronel que resultó fusilado por las tropas franquistas en Santoña, al este de Cantabria, en España, por lo que su familia fue exiliada a Francia. Aunque estudió arquitectura, terminó la carrera habiendo producido millares de bocetos de moda, en lugar de planos de construcción, evidentemente influenciado por el trabajo de su madre.
Dado que durante sus días de universidad logró hacer algo de “dinero extra” con sus diseños de moda, se dio cuenta de que tenía talento para el negocio y pronto dejó su trabajo en la industria de la construcción con una manufacturera de concreto para dedicarse al diseño de joyería para Givenchy, Dior y Balenciaga, lanzando, en 1996, su epónima marca de modas, Paco Rabanne, con la que en breve obtuvo fama internacional que no tardaría en aprovechar para hacer rabiar a todo el mundo de la moda, en particular al microcosmos de fashionistas que moraban en París.
El “Julio Verne de la alta costura”: Anárquico genio artístico
Los diseños de Rabanne fueron tan celebrados como vituperados, pues siempre tuvo una forma de causar polémica con su trabajo, sobre todo, cuando en el año de institución de su propia marca, lanzó la colección de “estreno” de su casa en el hotel George V de París. La colección se llamó Doce Vestidos Investibles hechos de Materiales Contemporáneos, los cuales eran exactamente eso, 12 vestidos que no estaban pensados para ser usados y fueron creados con plásticos y metal usando diseños futuristas, que debían ser lucidos por modelos en completa desnudez y sin zapatos.
El presentar “vestidos que no son para vestir” fue en parte una manifestación de cómo el joven Rabanne estaba encandilado con el movimiento filosófico Dadaísta (que gira alrededor del sinsentido). A esa primera colección le debió, en gran medida, la comparación que sus estudiosos hacen entre el diseñador de modas y el prolífico autor francés de ciencia ficción y fantasía del siglo XIX responsable de De la Tierra a la Luna y Veinte mil leguas de viaje submarino, pues en el trabajo de este “Julio Verne de la alta costura” se veía una proyección a futuro análoga con las proféticas páginas del literato.
Larga y prolífica carrera: Un legado indeleble
Considerado uno de los modistas más influyentes del siglo XX, su legado no solo permanece dentro de la casa que él mismo fundó, pues la inspiración que su innovadora filosofía llevó a las pasarelas sigue teniendo influencia en todo diseñador en el mundo actual. En la página de Instagram de su casa de modas, los que siguen manteniendo “el changarro” homenajearon a su “padre fundador”, dándole las gracias por todo lo que significó para el medio que ayudó a revolucionar durante décadas.
En la Casa de Paco Rabanne estamos agradecidos a monsieur Rabanne, nuestro honorable y visionario fundador, por establecer una herencia de vanguardia en nuestro medio que estableció desde el principio un futuro con posibilidades infinitas. Él fue una de las figuras seminales en la moda del siglo XX y su legado seguirá siendo por siempre una permanente fuente de inspiración. Queremos honrarlo hoy, 3 de febrero de 2023, día en que falleció a los 88 años de edad.
– Instagram de la Casa Paco Rabanne