No es raro ni nuevo que mujeres busquen en OnlyFans una segunda fuente de ingresos y en muchas ocasiones hasta es la principal forma en que se ganan la vida. Aun así, y a pesar de que el sitio es una “línea de vida” para algunas familias, sus creadoras de contenido siguen siendo criticadas y a veces se ven fuertemente afectadas por la presión de la sociedad.
Tal es el caso de la escocesa Kirsty Buchan, de 33 años, quien dice que se vio obligada a recurrir a la creación de contenido en la plataforma para sacar adelante a su familia luego de que le redujeran su salario como maestra de preparatoria. Sin embargo, cuando sus alumnos descubrieron su página, cuyo pseudónimo era Jessica Jackrabbit x, renunció a su puesto en la enseñanza antes de que la sometieran a medidas disciplinarias, pero, aun así, ha sido objeto de presión y bullying.
Chambeando extra para llegar a fin de mes y siendo bulleada por ello
Luego de que sus fotografías se volvieran virales, la profesora tomó la decisión de retirarse inmediatamente de su puesto en la preparatoria Bannerman, en Escocia. Según cuenta la madre, cuando su hijo cayó enfermo en marzo del año pasado tuvo que tomarse unos días para atenderlo, lo que resultó en un corte severo a su salario y la necesidad de buscar otro modo de conseguir el sustento para ambos, pues ella también enfermó y su petición de trabajar desde casa fue rechazada.
Ahora, al haber renunciado a su trabajo para evitar que abusaran de ella emocional y administrativamente en la escuela, en redes sociales la llaman “tonta” y de formas aún más despectivas, pero ella defiende sus acciones y pide respeto:
La gente me pregunta si estoy siendo est*pida, pero no lo soy y prueba de ello es mi título en Física por el que trabajé mucho. Así que puedo ir al trabajo y dejar que mis jefes me falten al respeto y abusen de mí o puedo subir imágenes y proveer para mi hijo. Para mí eso es usar la cabeza.
Para empezar, ¿qué hacían los niños viendo OnlyFans?
Imágenes sugerentes de la profesora han sido la excusa para que haya un flujo constante de quejas en el consejo de la ciudad de Glasgow, lo que llevó a que se iniciara una investigación sobre el asunto de la maestra y su actividad en OnlyFans. Aunque los padres de familia que se han visto escandalizados por el contenido de la profesora claman por medio de WhatsApp para que se le castigue por sus fotos inapropiadas, la profesora, que ya temía ser lapidada por los padres de familia y sus pares, ya había dejado su trabajo, impidiendo que la sometieran a escrutinios o castigos por “no dejar nada a la imaginación”.
La culpa de que sus hijos estén expuestos a ese material son los padres que no controlan adecuadamente el acceso a sus dispositivos, pues ningún menor debería ser capaz de ver ese contenido, que obviamente no fue hecho para ellos.
Así, cuando la gente pide que “piensen en los niños”, quizá deberían estar pensando en una contraseña menos evidente o en algún método para limitar el tráfico de sus “inocentes criaturas”.
Y los chicos aún la quieren
Luego de que la profesora se viera obligada a renunciar, y con tan solo cuatro días de dedicarse de lleno a su sitio de OnlyFans, la creadora fue capaz de suplir la pérdida que significó su renuncia, llevando sus percepciones al doble de lo que obtenía cuando era exclusivamente profesora. Sin embargo, otra sorpresa agradable que tuvo la educadora fue ver que el apoyo que alguna vez le dio a sus alumnos se le regresaba en forma palabras de aliento, quienes la querían de vuelta y entendían su situación. Algunos de los mensajes de sus alumnos decían “Usted hacía que valiera la pena ir a la escuela”, “Lo que hace en su vida no tiene que ver nada con lo profesional que es”, “Me da rabia cómo la trataron el público y la escuela” o “Es genuinamente la mejor maestra, no se merece el trato que ha recibido”.
Mis estudiantes están al tanto de que hago lo que tengo que hacer por mi hijo y que tengo el derecho de hacer lo que quiera con mi propio cuerpo. Siempre apoyé a mis alumnos y les enseñé que deben confiar en sí mismos y ahora me regresan el gesto y eso me da mucho orgullo. A pesar de que ha sido difícil soportar a los padres quejándose de mí, el aliento de mis alumnos y que ahora tengo más suscripciones me permitirán enfrentar la situación.
