Luego de la Revolución Industrial, la era del consumismo en serie comenzó sin que nadie pudiera detenerla, siendo un monstruo que crece desmedidamente.
De ahí, surgió la obsolescencia programada que fue adoptada por las diferentes compañías en el mundo. El flujo de efectivo, generación de empleos y crecimiento debía continuar, afirmaban. Para ello debían apostar a la generación de productos no tan durables, más bien desechables que provocaran el consumo desmedido.
Ahora nos encontramos con diferentes productos, casi todos, hechos bajo esta visión, y uno de ellos es el rastrillo para afeitarnos los varones.
Salvo los rastrillos que usaban los abuelos y que aquí te presentamos, ahora los rastrillos desechables o de cambio de repuesto no tienen mucha vida útil, sus navajas pierden el filo en poco tiempo de uso.
Puedes creer que es su ciclo de vida natural, pero lo cierto es que es un flagrante caso de obsolescencia programada.
Los antiguos rastrillos, aquellos de nuestros abuelos, eran mucho mejores, más resistentes y duraderos. Tal vez no tendrían 3, 4, 5 ó 6 navajas alienadas, ni cabezal basculante pero funcionaban igual de bien.
Para colmo, eran menos contaminantes pues, además de poder cambiar exclusivamente la cuchilla y reutilizar el mango y el cabezal, todas se podían afilar.
Junto a la espuma y demás enseres que las marcas de afeitado y cuidado facial masculino vendían, nuestros abuelos usaban el afilador de cuchillas. Una especie de tira de cuero que permitía afilar la hoja haciendo que su maquinilla o navaja durara mucho más tiempo.
Aunque las compañías actuales fabriquen sus rastrillos para provocar el consumo, existe una manera de afilar las cuchillas para aumentar su vida útil.
Para hacerlo, solo es necesario un pantalón de mezclilla -de vaquero- viejo, luego seguir las instrucciones de este video. En menos de 2 minutos contarás con navajas afiladas, ¡como nuevas!
El truco es que si la mueves sobre un área dura y rugosa con movimientos de abajo hacia arriba afilas la cuchilla. Es decir al contrario de como normalmente te afeitarías.
Aprovéchalo y ahorra dinero con este fantástico truco; ya no gastes tanto, mejor hay que afilar sus navajas y extender su vida útil.
Aquí tienes el video tutorial sobre cómo afilar las hojas de tus rastrillos:
