En general, la gente piensa que participar en videojuegos es una actividad que no requiere esfuerzo físico y que básicamente los jugadores “vegetan” mientras están inmersos en sus mundos electrónicos, pero la verdad es otra, pues el cerebro está funcionando activamente para enfrentar retos. Además, se ha comprobado que el estrés o esfuerzo al que se someten los gamers puede igualar e incluso superar al que se experimenta durante actividades físicas.
Un estudio llevado a cabo por Online Gambling USA, un portal de revisión de casinos que puedes apostar que está familiarizado con la respuesta de estrés ante riesgos y emociones, ha puesto a prueba a los videojuegos más populares para determinar cuál es el que más presión ejerce sobre sus jugadores y los resultados nos sorprenden, pues Mario Kart es, científicamente, el videojuego más estresante del estudio, mientras que Skyrim, que podríamos suponer que nos pondría al filo del asiento, es de los más relajantes.
El estudio
Los juegos que fueron sujetos al estudio fueron algunos de los más populares de la actualidad, como Mario Kart 8, FIFA 20, Call of Duty Modern Warfare, Dark Souls III, Fortnite, DOOM Eternal, Fall Guys, Battlefield 2042, Street Fighter V, Among Us, Grand Thefth Auto V, UNO!, The Sims 4, Animal Crossing New Horizons, Minecraft y Skyrim.
Para determinar cuál juego era el más estresante, se pusieron a prueba a 14 jugadores y se procedió a medir sus ritmos cardíacos en sesiones de 30 minutos en cada juego. Los resultados se dieron tomando en cuenta qué juegos son los que aumentaban más, en promedio, el ritmo cardíaco del jugador y cuáles eran los que alcanzaban los valores más altos durante las pruebas.
Los juegos más estresantes
Con las reglas ya establecidas, se procedió a realizarse las mediciones pertinentes y resultó que Mario Kart se llevó el título de juego más estresante por un pequeño margen frente a FIFA 20. El grupo de jugadores tenía un promedio de 64 BPM (latidos por minuto) en reposo, pero al jugar Mario Kart, obtuvieron un promedio de 85 BPM, un 32.81 por ciento más que sin jugar. Para comparar, FIFA 20 elevaba el ritmo cardíaco hasta 84 BPM; Call of Duty Modern Warfare, a 83 BPM; Dark Souls III, hasta 82 BPM, y Fortnite, hasta 81 BPM.
Los valores más altos fueron alcanzados por Darksouls III (127 BPM), Fall Guys (125 BPM), Mario Kart (111 BPM), Street Fighter V (110 BMP) y FIFA 20 (107 BPM) en momentos especialmente estresantes. La diferencia entre el estrés provocado por los cinco juegos más estresantes es mínima y por un pequeño margen quedaron fuera del Top 5 juegos como Street Fighter 5 y DOOM Eternal. Para comparar, los ritmos cardíacos registrados equivalen a una caminata ligera y una medición similar durante apuestas deportivas. Según el portal que creó el estudio, estos títulos rondan alrededor de los 75 BPM, significativamente un número menor que mientras juegas estos estresantes videojuegos.
Los juegos más relajantes
En el otro lado del espectro tenemos a los juegos menos estresantes y para sorpresa de nadie, estos juegos no solo no aumentan el ritmo cardíaco normal, sino que incluso los redujeron. Por supuesto, los juegos que podríamos esperar que tuvieran esos efectos son Animal Crossing y The Sims, pero una sorpresa se presentó cuando la épica historia de fantasía Skyrim se encontró entre los juegos que mantenían más bajo el ritmo cardíaco de los participantes.
Aunque es cierto que las emociones fuertes que pueden traer los juegos son placenteras, pues nos hacen “sentir vivos”, también hay que valorar las experiencias de confort y relajamiento que algunas de las propuestas más light en la industria tienen que ofrecer, pues pueden incluso ser terapéuticas, así que jugar en los mundos fantásticos de Animal Crossing New Horizons, en el mundo ideal de los Sims o incluso en las tierras salvajes de Skyrim puede resultar un verdadero agasajo y un merecido descanso del estrés diario.
