Haití se encuentra en una de sus crisis históricas más difíciles, y la situación de por sí tensa se volvió mucho peor cuando un grupo armado atacó al presidente Jovenel Moïse y lo asesinó en su propia casa.
La situación política, económica y social en el país más pobre de Latinoamérica ha llegado a un punto de conflicto máximo y conforme avanzan las investigaciones sobre la muerte de Moïse, se está relevando más información alarmante. Ahora se sabe que parte del comando armado arrestado en Haití recibió entrenamiento militar en el Pentágono de Estados Unidos.
Después de conseguir su independencia de Francia en 1803, Haití ha tenido como presidentes a militares, sacerdotes, empresarios y hasta cantantes. Moïse fue el último líder electo que llegó al poder en el 2017 mientras era investigado por un caso de corrupción relacionado a su antecesor Michel Martelly.
La noche del 7 de julio del 2021, un grupo de individuos armados entraron a la casa de Moïse y lo asesinaron a tiros en su cama. La primera dama Martine Moïse apenas consiguió sobrevivir, aunque también recibió un disparo y tuvo que ser trasladada a Miami para una operación de emergencia.
Las fuerzas armadas de Haití lograron detener al comando de sicarios después del asesinato del presidente. Durante la captura, tres individuos murieron y se detuvieron a 24 colombianos y dos haitianos, quienes están siendo interrogados para averiguar las intenciones de este ataque.
Al dar a conocer los nombres de los involucrados, el Pentágono confirmó que algunos de los colombianos (no precisaron cuántos) habían recibido entrenamiento militar en Estados Unidos mientras eran miembros activos de las fuerzas militares de Colombia.
Estados Unidos es uno de los más importantes socios de Colombia, pues no solamente le ofrece habitualmente formación militar a sus soldados, sino que también financia la lucha contra guerrilleros y grupos extremistas en ese país y en otras partes de Latinoamérica.
El director de la policía de Colombia, el general Jorge Luis Vargas, confirmó que de entre los detenidos, los colombianos Germán Rivera y Duberney Capador se habían reunido con el médico Emmanuel Sannon para organizar y reclutar a los sicarios que mataron a Moïse. Además, Sannon fue detenido como presunto instigador de este magnicidio en Haití.
Hasta ahora los arrestados declararon que el comando tenía la misión de capturar a Moïse y entregarlo a la Administración de Control de Drogas (DEA) de Estados Unidos. Sin embargo, el general Vargas sugirió que esto podría tratarse de un engaño.
La policía de Haití está tratando de descubrir si este asesinato se trata de un golpe de estado organizado por los líderes criminales que controlan el país o si acaso hay otras naciones implicadas en este vacío de poder. Incluso se está investigando al primer ministro Joseph Claude, aunque hasta ahora no se le ha vinculado al asesinato de Moïse.
Sin el presidente Moïse, los cárteles en guerra por controlar la nación y la ausencia de vacunas contra el covid-19, Haití está pasando por uno de sus momentos más críticos y nadie sabe qué es lo que sucederá en el futuro.
