El teléfono se convirtió en el archivo de recuerdos favorito de las personas, pues ahí se guardan fotos, videos, audios y demás memorias de las personas que amamos, lo que tiene un gran riesgo porque si lo perdemos, todos nuestros recuerdos se van con él, como le pasó a un pequeño que tenía guardados momentos con su mamá, quien hace poco falleció.
El niño estaba muy triste porque recientemente su mamá falleció y en su teléfono tenía fotos y videos de ella, pero en un descuido lo perdió en una tienda en Piedras Negras, Coahuila, México, así que su tía decidió convocar a la comunidad en redes sociales para que le ayudaran a encontrar el dispositivo, pues cuando se unen en internet, se pueden lograr cosas increíbles.
A través de su cuenta en Facebook, Valeria, la tía del niño, hizo el llamado para que los ayudaran a encontrar el teléfono. La historia conmovió tanto a todos que a los pocos minutos, la publicación se compartió cientos de veces y el milagro se produjo: tres horas después lograron recuperar el teléfono y por supuesto que estaban muy contentos y agradecidos.
Estamos muy conmovidos y agradecidos, pues en muy poco tiempo fueron tantas las personas con un gran corazón compartieron y ayudaron en esta búsqueda. Gracias a las buenas personas que lo encontraron y lo devolvieron.
-Valeria, en redes sociales
Desafortunadamente, cuando les entregaron el teléfono ya estaba con la pantalla quebrada y no encendía, por lo que de nuevo la tristeza se apoderó del niño y de su tía, porque pensaban que tal vez no podrían recuperar la información, que es lo que realmente les importaba, pero de nueva cuenta, las buenas personas que entran a redes sociales llegaron al rescate y alguien se ofreció a arreglarlo.
Un usuario conmovido por la historia se ofreció a reparar el teléfono, ya que a eso se dedica, y lo mejor de todo es que lo hizo sin cobrar un solo centavo, lo que es una muestra más de que cuando nos unimos, todo es más sencillo y no hay problema que no se pueda resolver, incluso recuperar los recuerdos que creíamos perdidos. Por fortuna, esta historia tuvo un final feliz para este pequeño.
