Conozcan a Michael Owen -no el futbolista- sino el chico galés de 22 años, jugador de rugby, quien sostuvo de la mano, por más de una hora, a una chica que estaba a punto de saltar de un puente, cerca de Chippenham, Wiltshire, en Inglaterra.
El valiente joven viajaba con su novia, Jemma, cuando se percataron de que la mujer se encontraba de pie en el borde del puente. Ella había saltado las protecciones de seguridad, y se encontraba frente a una concurrida autopista.
En ese momento, nuestro héroe, portero del equipo de Swansea, se acercó a ella y comenzó a hablarle, la tomó de la mano, a pesar de haberse fracturado semanas antes durante un partido de rugby.
Este gran chico -literal, puesto que mide casi 2 metros- relató:
“Conducíamos por la autopista, cuando mi pareja apuntó en dirección a la mujer, quien se encontraba parada del otro lado del puente. De manera inmediata estacioné el auto e intenté detener el tráfico para poder ayudarla. Llegué con ella e intenté hablarle. Se veía triste y desconcertada, así que sólo comencé a hablar”.
Michael cuenta que pasado un tiempo, la mujer pareció calmarse, mientras el seguía dándole la mano para que no se resbalara. Los bomberos llegaron poco después a la escena a ayudar a Michael, pues la mujer tenía miedo de bajar del puente.
“La policía cerró el camino, estacionó el carro de bomberos bajo el puente por si ella caía.”
De vuelta a casa, al sur de Gales, la hermana de Michael, Sarah, dijo sentirse orgullosa de su hermano y de la increíble hazaña ocurrida. Ella dijo:
“Michael tiene una asombrosa personalidad, un gran corazón, el cual es evidente por las acciones que pudimos ver.”
¡Un aplauso para este gran héroe!
