Si tu fortuna es de miles de millones de dólares (y en este caso no es exageración), puedes tener muchos beneficios, ya sea que te den una exclusiva tarjeta de McDonald’s con la que podrás obtener gratis todas las hamburguesas que quieras o irte de vacaciones al espacio exterior por unos días, como lo hará Jeff Bezos, quien se pondrá en órbita en el mes de julio.
Si todo sale como está planeado, el 20 de julio de 2021, Bezos estará en el espacio exterior y será el primero de la lista de los más ricos del mundo en hacerlo, incluso antes que Elon Musk a pesar de que este tiene su propia empresa que construye naves espaciales y está en el camino de ofrecer “turismo espacial”, para que las personas que lo deseen, y paguen una buena cantidad de dólares, tengan esta increíble experiencia.
Jeff comentó que desde los cinco años soñaba con viajar en una nave espacial, y parece que a sus 57 años cumplirá ese sueño en una cápsula para seis personas, diseñada por Blue Origin y que será un modelo reutilizable para poner en órbita a las personas que paguen por un viaje breve al espacio, pasando la línea de Kármán, que es considerada como “la frontera” entre nuestro planeta y el resto del sistema solar.
Theodore von Kármán, un físico húngaro-americano, postuló que a 91.7 kilómetros sobre la Tierra ya no existe aire, por lo que se puede decir que ya es el “espacio exterior”, así que la nave en la que viajará Bezos alcanzará esa altura y luego de un breve instante regresará a nuestro planeta, algo como dar un breve recorrido en una atracción de la feria, solo que acá te convertirás en astronauta.
El 20 de julio, Bezos, su hermano y otros cuatro amigos abordarán la cápsula New Shepard, en honor al astronauta Alan Shepard, y realizarán un viaje de 11 minutos hasta alcanzar una altura de 96.5 kilómetros, con lo que será suficiente para pasar la línea de Kármán y con eso superar oficialmente la frontera del espacio exterior. No sabemos cuánto pagó Bezos, pero se sabe que en una subasta alguien pagó tres millones de dólares por un solo asiento en esta cápsula.
Posiblemente, Bezos pagó varios millones de dólares por este viaje para él y sus invitados, pero teniendo en cuenta que su fortuna está estimada en 187 billones de dólares, esto fue como quitarle un pelo a un gato. Estamos seguros de que este viaje será un recuerdo que lo acompañará por siempre, ya que cuando tenía cinco años fue testigo de la llegada del hombre a la luna y desde entonces ha soñando con estar en el espacio, aunque sea por solo unos minutos.
