En 1993 la llegada de los Power Rangers marcó a toda una generación y desató una auténtica locura por estos personajes que hasta la fecha se siguen produciendo series; pero claro, siempre está presente la nostalgia por ese grupo de adolescentes que encarnaron por primera vez a los encargados de enfrentarse a un montón de extraños monstruos. De entre esos juveniles héroes destacaba la Power Ranger rosa, el crush de miles de adolescentes, que ahora, como ella, ya son más grandecitos.
Amy Jo Johnson es el nombre de esta actriz, quien primero se dedicó a la gimnasia artística e incluso llegó a participar en unos Juegos Olímpicos; sin embargo, una fractura en un codo la hizo alejarse de este deporte de manera profesional.
Aunque las habilidades ganadas le sirvieron para formar parte del elenco de la popular serie, sobre todo para las escenas de batallas y piruetas, ya no era precisamente una adolescente como se mostraba en el programa. Ya tenía 23 años cuando se convirtió en la Power Ranger rosa.
Nació el 6 de octubre de 1970 en Massachusetts, y luego de su lesión se puso a estudiar actuación en Nueva York y después se mudó a Los Ángeles donde encontró el éxito con los Power Rangers y desde entonces se ha mantenido activa en diferentes producciones
Como suele suceder en estos casos, es y seguirá siendo recordada por su papel en esa exitosa serie, aunque hay que decirlo y tal vez vas a sentir que te duelen las rodillas: ya cumplió 50 años, lo que implica que tú ya tampoco eres un adolescente.
Actualmente sigue trabajando como actriz y se mantiene activa en Instagram, donde comparte sus fotos con sus hijos y tiene más de 210 mil seguidores, la mayoría de los cuales seguramente son nostálgicos que todavía siguen enamorados de ella, o al menos de la imagen que tenían de ella en su traje rosa, aunque hay que decirlo: a sus 50 años todavía luce muy bien, solo que probablemente ya no pueda hacer las mismas piruetas que antes.
Ya pasaron casi 30 años del estreno de la primera serie de los Power Rangers, y no es poca cosa, porque si te pones a pensar tu vida es otra completamente, o al menos eso esperamos.
Y ahora, al igual que Amy, ya tienes hijos y tampoco puedes hacer los movimientos que realizabas cuando eras un adolescente, pero guardas el recuerdo de esos bellos momentos en que te sentabas a disfrutar de la acción y a suspirar por la increíble Power Ranger rosa.
