Ay, los niños, esos pequeños humanitos que descubren el mundo para convertirse en las personas que la sociedad espera. Observar la mirada de un infante y ver su sonrisa no tiene precio, pero solo los padres saben el sacrificio que hay detrás de la crianza de los nenes.
Por ejemplo, el siguiente papi que les vamos a presentar, quien al quedarse dormido, no se dio cuenta de que sus hijos le raparon la cabeza. Cuando despertó, se llevó la grata sorpresa de tener el peinado a Gargamel.
Las imágenes fueron compartidas por su esposa Sus Gutiérrez, quien grabó los instantes después de que el padre se despertara sin saber lo que estaba pasando. En el video, la mujer le pregunta qué le pasó y quién le hizo eso mientras el padre, buscando saber la verdad, le pasa la pregunta a su hija Antonella.
Pero la niña lavó sus manos de inmediato señalando al culpable. La señora de la casa no podía creer lo que estaba pasando, pues en el video se alcanza a escuchar que solo se había metido a bañar y al regresar, encontró a su pareja sin la parte superior de su cabellera.
Se le pasaron las copas y ni sintió cuando sus bendiciones lo raparon. Ni como reclamarles a las criaturas. pic.twitter.com/EiWdKWEPax
— tacodealacran (@tacodealacran) October 5, 2022
El video publicado en TikTok con el texto “Dios, lo que hace el alcohol” ha logrado sumar más de 20.2 millones de reproducciones y más de 22 300 comentarios, que van desde las recriminaciones por estar supuestamente ebrio hasta las que solicitan los servicios de las bendiciones.
‘Tienes que cuidarlo más. No lo dejes bajo la supervisión de los niños’; ‘El que se duerme pierde’; ”Se cayó y se mató’ no hay mejor explicación’; ‘Y desde entonces no volvió a tomar alcohol’; ‘Esos niños junto con el papá deberían pensar en la nueva película de ‘¿Qué pasó ayer?”.
—Comentarios en el video
https://twitter.com/tacodealacran/status/1577689627187625984
Para los que son gustosos de segundas partes, esta historia tiene una. Momentos después, el señor tuvo que despedirse del resto de su cabello y ahora sí quedó como bola de billar. Sin duda, aprendió una lección de la mano de sus hijos.