Vivir en el siglo XXI significa que no importa dénde estés o lo que estás haciendo: es muy probable que alguien te esté grabando con un teléfono.
Simplemente no hay momento que alguien deje escapar, ya sea sobre su propia vida o la de los demás, y todo para subirlo a internet y ser la diversión (o la burla) de todos. Y esto sucede todos los días.
Así que te vamos a presentar a uno más de estos casos de popularidad intensa y efímera; se trata de Brandon, un niño que después de ser operado por un brazo roto estaba totalmente convencido que acababa de llegar de un viaje a Dubai ¡y se había comprado un camello!
Obviamente, todo esto fue debido a los efectos de la anestesia. Veamos los primeros instantes cuando despertó:
Parece que estaba muy contento y luego un poco ansioso, y entre algunos gritos y palabras incomprensibles comenzaba a “despertar”.
Tal vez no estaba tan inconsciente, pues Brandon dice: “Ni siquiera puedo pensar bien ahora, lo juro, voy a ¡wooooooohhhhhhh!”. La voz de su madre se escucha y le dice: “No grites”, pero la euforia de este niño es incontrolable, y es que, dice estar en Dubai donde “compré un camello, compré un camello”…
Luego viene la parte donde “se monta” a su camello y empieza a recorrer “todo Duabai”. Pero eso no es todo, cuando le preguntan si además de su camello compró algo más en Dubai, asegura: “billones de stripers”… Por supuesto que su madre le dice: No, stripers no”. Y claro, el emocionado chamaco responde: “Claro que sí habrá stripers, ¿de qué hablas, mujer rara?”.
Parece que el viaje continúa, y también, que se la está pasando muy bien, incluso dice “me siento maravilloso”, y luego dice que volverá dormir, entre vocecitas y gritos chsitosos, pero no lo cumple, pues sigue hablando y hablando…
Parece que este fue un verdadero viaje, aunque no pudimos ver su reacción cuando pasó la anestesia y se dio cuenta que estaba en un hospital y no en Dubai…
¿Qué diría de que no estaba tampoco su camello?
