Dave Grohl cayó del escenario durante uno de sus conciertos y terminó con una pierna fracturada; el mismísimo Paul McCartney organizó la cirugía para el líder de los Foo Fighters.
El vocalista y guitarrista de los Foo Fighters tiene algunos problemas con la ley de gravedad. No es la primera vez que en un concierto Dave resbala o pierde el piso. Normalmente, el antiguo baterista de Nirvana es un tipo rudo y continúa tocando después de bajar a saludar el suelo.
Y en el concierto en Gothenburg, Suecia no fue la excepción. Solo que esta vez el daño fue más que unos moretones. En el concierto que los Foo Fighters dieron en junio, Dave Grohl, cayó del escenario y se fracturó la pierna derecha. Aún así el concierto siguió como estaba programado.
Las muestras de afecto de los seguidores no se hicieron esperar, pero el gesto de Paul McCartney fue de lo más espectacular, pues él y su familia fueron los que organizaron la cirugía en Londres para la pierna de Dave.
Dave Grohl siempre ha reconocido que es un gran admirador del bajista de los Beatles, pero después de este generoso acto Dave adora a McCartney.
No estaría caminando si no fuera por Paul McCartney. Él conoce a unos j#did#s doctores muy buenos.
Otro artista que también envió sus mejores deseos a Dave fue Lionel Ritchie, quien le envió una canasta, enorme, con seis mil muffins y una tarjeta que decía: “Sentimos lo de tu pierna, te extrañamos en Glastonbury, mejórate pronto”.
La relación de McCartney y Dave no solamente es de amistad sino que también Dave ha adelantado que en su próximo disco Concrete and Gold, habrá una canción en la que Paul toca la batería. Dicha producción contará con otras participaciones de varias estrellas, algo que promete ser una joya que estamos impacientes por escuchar.
Esperemos que Grohl se mejore pronto y que no se tome tan literal la expresión artística: “sal y rómpete una pierna”.
