Después de ese primer encuentro y de semanas de textos en el celular, publicaciones en Facebook y Twitter, por fin te decidiste a pedirle a esa chica que te gusta que salga contigo, y también, por fin aceptó salir… ¡seguro estás hecho un manojo de nervios!
No nos burlaremos de ti; sabemos que una primera cita puede ser algo terrible y las chicas pueden llegar a ser aterradoras. Por ello, aquí te dejamos los consejos de Robert Cox, experto en relaciones, para que esa cita que tanto has esperado no sea una pesadilla, sino el inicio de una relación con la chica de tus sueños. ¡Pon atención!
1. Toma el control
“Las mujeres siempre se impresionan cuando un hombre toma el control de la situación. Tal vez sea anticuado, pero la determinación y la confianza nunca dejarán de ser atractivas. Suena un poco raro, y no debes de exagerar en esto, pero da una pequeña mirada a sus fotos de Facebook para ver qué tipo de cosas son las que por lo general le gusta hacer cuando sale, de esa manera obtendrás una buena idea de lo que le gustaría hacer en su cita. Eso sí, no te dejes llevar y empieces a darle Me Gusta a sus fotos del 2012. No serás correspondido”.
2. Permanece tranquilo
“Todo lo que puedes hacer, es ser tú mismo. No eres Don Draper de Mad Men -a menos que estés, en todo caso, usando un buen traje – por lo que no trates de ser demasiado suave. No pidas un whisky solo si te vas a retorcer a cada sorbo. No trates de actuar tan misterioso, que termines allí sentado durante 30 minutos en un silencio absoluto. Puedes preocuparte hasta la muerte de la vibra que emites, pero en última instancia, lo peor que puede pasar es que no le gustes. Y cada hombre tiene una experiencia en eso, incluso Don Draper”.
3. Debes ser un rey de la conversación
“La conversación debe ser del 70% sobre ella y el 30% sobre ti. Mantén el contacto visual, pero siempre recuerda parpadear; hay una línea muy fina entre ‘atento’ e ‘inquietante’. No gastes tu tiempo en hacerle preguntas aburridas -si escuchas lo bastante bien, nunca te quedarás sin cosas de qué hablar-. Siempre será un poco incómodo al principio, así que no dejes que eso te moleste. La conversación fluirá al final. Eso sí, no caigas en la tentación de beber en exceso antes de la cita. Mala idea”.
4. Hazla reír
“Las historias son siempre más divertidas que los chistes. Ninguna chica quiere sentarse allí a ver que sin descanso hagas pésimos chistes. Solo cuenta una anécdota hilarante o embarazosa. Es un cliché, pero la humildad y el sentido del humor realmente son las cualidades más atractivas que una persona puede poseer. No te excedas, porque vas a terminar pareciendo una especie de horrible conejito Energizer de la comedia. Al final del día, siempre y cuando la chica se ría contigo y no de ti, tú serás un ganador”.
5. Come adecuadamente
“Si tienes que elegir un restaurante, debes ser consciente de que una mala elección culinaria puede romper la cita. Nunca pidas algo demasiado complicado, especialmente el espagueti a la boloñesa -van a terminar pareciéndose a ‘La dama y el vagabundo’ pero por razones equivocadas-. Además, mantente alejado de las ostras -cualquiera que sea el científico retorcido que declaró que esos mocos viscosos eran afrodisíacos, se estaba burlando de todos en sus caras-. Una buena pasta o pollo, asegurará que mantengas tu dignidad. Como he dicho antes, no bebas demasiado… a menos que ella quiera, en cuyo caso, es una idea absolutamente brillante”.
6. Paga la cuenta
“A nadie le gusta un tacaño. Pero, ¿quién paga en la primera cita?, es un campo de minas social de grandes proporciones. Al final de una comida, lo mejor es tomar el control y darle tu tarjeta directamente al mesero. Líbrate de sus objeciones diciendo: ‘Yo me hago cargo’ – será otra manera de hacerla sentir especial-. Si insiste en que quiere pagar su cuenta, es probable que sea mejor que la dejes hacerlo. Pero lo más probable es que solo quiere salir tan pronto como sea posible… probablemente para tomar una bebida en su casa”.
7. Lee las señales
“Las chicas son complicadas, pero son bastante fáciles de leer cuando se trata de la técnica del flirteo. Mantén la mirada en la forma en que se enrosca el cabello, prolonga el contacto visual y acaricia el brazo (el tuyo, no el de ella. Eso solo significa que ella es fría). No hagas jugadas difíciles de lograr -aunque parezca que eso es lo que debes hacer, acabarás por convencerla de que no estás interesado, es decir, nadie gana-. Si al final de la noche ella ladea la cabeza y mira tus labios, es una misión cumplida. Haz tu movimiento, vaquero”.
