Perros de reserva (1992) es de esos filmes de culto que mantienen su vigencia a pesar de su evidente apariencia descuidada o sórdida. Es más, probablemente parte del encanto de la ópera prima de Quentin Tarantino radica en la crudeza misma de producción. Por eso no es de extrañar que los datos fríos y descarnados sobre la película también nos encanten.
La historia de cómo se filmó Perros de reserva es casi tan cautivadora como la cinta y no deja de sorprendernos todo lo que no sabíamos sobre los involucrados y la producción. No todo es lo que parece en el cine y estos 16 datos al descubierto de la primera gran producción de Tarantino son geniales.
1. Era un proyecto de recreación
Originalmente, el filme iba a ser filmado por Quentin Tarantino solo “por diversión”, para pasar un buen rato con sus camaradas y carcajearse de las tonterías que hicieran, pero terminó convirtiéndose en un hito en la historia del cine y logró recaudar 14 661 007 dólares.
2. Una serie de eventos afortunados
El productor Lawrence Bender, que originalmente interpretaría a Eddie Cabot, terminó involucrando al actor Harvey Keitel en el proyecto debido a que la esposa de su profesor de actuación le entregó una copia del guion al protagonista de Los duelistas (1977).
Keitel no solo se interesó en tener un papel en la película, sino que la coprodujo y consiguió apoyo suficiente para convertir al filme independiente en lo que terminó siendo.
3. Presupuesto original y final
Originalmente se tenía pensado que la película costaría 30 mil dólares, porque abaratarían todo empleando solo a amigos de Tarantino y ahorrando al máximo.
Con la entrada de Keitel al proyecto, se logró aumentar el presupuesto de 30 mil a 1.2 millones de dólares, algo así como un crecimiento del 4000 por ciento para mejorarla en todos los aspectos.
4. Fue un film diminuto en términos financieros
En los 90, el promedio de presupuestos en películas llegó a ser de 53 millones de dólares por producción para 1998, con muchas películas costando considerablemente más que 100 millones de dólares. A Perros de reserva le bastó el 1 por ciento de eso para hacer historia.
5. Fueron realmente rápidos
La filmación tuvo lugar en tan solo 35 días cuando las producciones grandes se toman unos 120 días de filmación. Por supuesto, el hecho de que el dinero cuesta los obligó a hacer todo más rápido y con menos tomas, pero aun así, fueron muy veloces.
6. Desconocido en casa, celebridad en Reino Unido
La publicidad de la película en Estados Unidos dejó mucho que desear, por lo que el filme no se conoció mucho allá durante su lanzamiento. Sin embargo, Perros de reserva fue colosalmente popular en Inglaterra, tanto así que durante su subsecuente visita a Londres, a Tarantino lo rodearían multitudes de entusiastas fans.
7. A la vanguardia en promoción
Durante el lanzamiento europeo, las compañías distribuidoras emplearon afiches individuales de hoja entera para cada uno de los personajes principales, cosa que en ese entonces no era utilizada, pero ahora se ha vuelto la norma.
8. Escena ad hoc
La escena inicial del comedor, al principio de la película, fue agregada a la película con el expreso propósito de permitir que el Sr. Blue, interpretado por Edward Bunker, dijera algunas líneas en su tiempo en pantalla porque hasta entonces había sido el único personaje que “no decía ni pío” en todo el filme.
9. Guionismo exprés
El tiempo que le tomó a Quentin Tarantino escribir el primer bosquejo del guion no superó las tres semanas y media. Un guion con tres personajes principales suele llevarse tres meses en esa etapa, pero recordemos que Perros de reserva tiene seis personajes “principales”, haciendo el proceso más truculento.
10. No iba a ser “a color”
Con su presupuesto inicial, se tenía contemplado filmarlo todo en un formato de 16 mm, resultando en una película en blanco y negro, lo que hubiera sido ideal para un proyecto de recreo pero que quizá le hubiera restado público durante su estreno en cines.
11. El departamento del Sr. Orange
El departamento del Sr. Orange no estaba en un set distinto al de la bodega donde se filmó la mayor parte de la cinta, sino que es meramente un espacio en el segundo piso del edificio donde ocurre el grueso de la trama. Para no tener que rentar un departamento de verdad y ahorrar dinero, decoraron ese espacio para simular que era su vivienda.
12. El hermanito de John Travolta
El nombre real del Sr. Blonde es Vic Vegas y, efectivamente, es el hermano de Vincent Vegas, el psicótico matón interpretado por John Travolta en Tiempos violentos (1994).
13. Malentendido con Madonna
Madonna adoró la película, pero quiso aclarar un error que Quentin Tarantino puso en la conversación que ocurre en el comedor, al principio de la película.
El tema principal de la plática durante la escena tiene que ver con su canción Like a Virgin, pero, según la cantante, su interpretación de la letra fue errónea y para aclararlo, le regaló una copia de su álbum Erotica a Tarantino, firmado así: “Para Quentin. No se trata de ver*as, se trata del amor. Madonna”.
14. Rompiendo la ley de como la ley manda
Debido a que no había dinero suficiente para asegurarse la asistencia policíaca en control de tránsito, en la escena en la que Steve Buscemi saca a una mujer de su auto para huir en él, solo pudo hacerlo cuando las leyes de tráfico se lo permitieron, esto es, cuando las luces estaban verdes.
15. Tim Roth fue convencido por el alcohol
Tim Roth no estuvo a bordeo del proyecto desde el comienzo y, de hecho, se negó rotundamente a leer alguna línea para entrar en el filme. Sin embargo, lo que sí quería era irse de juerga con Tarantino y con Harvey Keitel.
Cuando ya estaban todos “felices” por la influencia de la bebida, Roth estuvo de acuerdo en leer el papel que le proponían y posteriormente en participar en la película.
16. Nadie sabe qué rayos significa el título
Aunque ha sido interrogado en distintas ocasiones respecto al título de su obra, Quentin Tarantino sigue manteniendo bajo un hermético silencio la razón real por la que nombró al filme Perros de reserva. Solo tenemos conjeturas.
