Esto será lo más épico que habrás visto. Un tipo llamado Sean Fahmy realizó un gracioso experimento: creó una cuenta en Tinder haciéndose pasar por una botella de Merlot de 24 años para ver a cuántas chicas ligaba así.
¿Qué harían las mujeres al encontrarse una cuenta así? ¿Le corresponderían, se enamorarían? El experimento fue todo un éxito, sin dejar de lado que dejó conversaciones muy graciosas con esas chicas que lo aceptaron. ¡Esto es muy gracioso!
Vino, 24. A menos de una milla:
“Seré honesto. Yo sólo quiero estar adentro de ti. Algunas veces puedo estar afrutado, pero otras veces también dulce. Usualmente las chicas beben mi cuerpo a diferentes velocidades, dependiendo de qué tan mierda fue su día. Algunas son de alta velocidad, otras son Merlot. No estoy gordo; solamente tengo cuerpo. Tengo un tallo de seis pulgadas; no es nada especial pero es el promedio. Sé amable con mis uvas.
Estuve encerrado por mucho tiempo en una barrica de roble y no quiero hablar de eso. Si de repente platico mucho sólo dime que me ponga el corcho”.
Y por supuesto las mujeres cayeron ante su encanto. Estas son algunas de sus divertidas conversaciones.
1.
– Qué tal chica. ¿Tienes sed? Te puedo emborrachar
– ¡Sí!
– Llama a un taxi y ven entonces. Como con el Cabernet, pongamos dos botellas en esas manitas.
– Para ser honesta, eres mi favorito
– Y espera a que veas mi Pinot.
2.
– Así que estás interesada, ¿verdad? Sé que deslizaste a la derecha. Tú me lees la mente.
– Sí lo hago
– ¿Quieres tocar mis taninos?
– ¿Tus qué?
– La sustancia orgánica que está en mí y que me da un mejor sabor. Guapo, ¿verdad? Lo sé
3.
– Para Halloween me disfrazo de Obi Wine-Kenobi
– ¡Te amo! Mándame fotos o no pasará
– No recuerdo dónde dejé las fotos. Soy una especie de dibujo blanc [blanco].
4.
– Me encantaría estar adentro de ti algunas veces. ¿Puedes tomar todo esto, o prefieres traer a una amiga para que te ayude?
– ¡Sí, por favor! Lo puedo tomar todo. Aunque también sería bueno compartir
– Me lees la mente. Será mejor que te lo tragues. Ésta no es ninguna elegante cata de vinos en Temecula donde escupes todo. Yo no juego así.
– Escupir sería un desperdicio muy grande
– Esa es mi chica. ¡Vamos a conocernos! Estoy comunmente en las licorerías
– ¡Toda la noche!
– No toda la noche; sólo la primera mitad.
5.
– Espero que nunca hayas estado con los ‘blancos’. Si fue así, yo preferiría que no me tocaras con las mismas manos
– Una vez que conoces los ‘rojos’ no hay vuelta atrás. Puedes poner tu botella en mi cabernet cuando quieras.
6.
– Hola. Soy un Pinot Noir. Eso es italiano para pen3s n3gros. Así que, ¿haremos esto o qué?.
7.
– Vamos, hazlo. Es casi la 1 pm, nadie te juzgará
– ¡Oh, está encendido! Gracias shiraz, muchas gracias. En realidad es Syrah; Shiraz es mi hermano de otro racimo de uvas.
– Eso es increíble, no puedo decir que te he bebido, pero si eres igual a tu hermano seguro eres muy delicioso.
– Whoa, ¿a cuántos de mis hermanos te has bebido? ¿Qué eres, una especie de zorra del vino? Porque entonces no estoy interesado
– Sólo a algunos hombres. Yo prefiero rojos.
