Caballeros, hablemos de fútbol y su conexión con las cosas buenas que pasan en este mundo y para aquellos que no gusten de este deporte, déjenme decirles que no todo es patadas y correr tras un balón, no señores, el fútbol es sobre unión y compañerismo.
La mayoría de los clubes cuentan con una canción representativa, no necesariamente un himno, sino una canción que al escucharla inmediatamente los demás fanáticos cantan al unisono, por ejemplo Glory Glory Man United, Cómo no te voy a querer, entre muchos otras.
Para el Ajax, de Amsterdam, es la clásica canción de Bob Marley, Three Little Birds, esa que dice: ‘Don’t worry about a thing / ‘cos every little thing / is gonna be alright‘. Y parecía que era cierto, ya que el club holandés se mantuvo y progresó a la final de la Liga Europea.
Ahora se enfrentarán al Manchester United en la final, en Estocolmo, este 24 de mayo. Pero tal vez la victoria, en conjunto, también fue influenciada no solo por la letra de su canción, sino por su gesto de buena voluntad hacia un cantante callejero que se encontraba en las calles de Lyon antes del partido.
Los aficionados se encontraban disfrutando de algunas bebidas antes del juego, mientras un cantante los entretenía en un local con su guitarra. Entonces, alguien le pidió que interpretara el himno del club, a lo que el hombre, debidamente obligado, comenzó la melodía y recibió una gran acogida.
Vistiendo una sudadera negra, con una barba gris prominente y unos pantalones cortos y rasgados, el músico fue inundado de generosidad por parte de los aficionados del Ajax, quienes pasaban ordenadamente a dejar unas cuantas monedas al hombre, que estaba completamente abrumado por lo que estaba sucediendo.
Ya ven, caballeros, dicen que lo que se siembra se recoge y claramente, esto se dejó ver en el triunfo del Ajax 5-4, donde tal vez la buena vibra de sus seguidores ayudó un poco.
¡Veel geluk in de finale, Ajax (Buena suerte en la final, Ajax)!
