Reportarse enfermo para no ir al trabajo es una técnica estándar que puede servirte una que otra vez, pero fingir un desvanecimiento es una estrategia más arriesgada y peligrosa aunque mucho más efectiva, y este fulano lo demuestra.
No le podían reclamar que hubiera llegado al trabajo con una resaca tremenda, porque al menos no estaba faltando, ¿cierto? Pero él se sentía muy mal — algo que sucede cuando bebes Jägers como si fueran agua — y se le ocurrió una locura muy dramática para que lo mandaran a su casa.
En un video compartido en Twitter, el usuario ElpedroThe2nd confesó que mientras la gerente estaba frente a él en una caja registradora fingió un desmayo, bastante convincente como para que le dieran atención y sus jefes decidieran enviarlo a casa.
Este empleado comenzó a hacer gestos de dolor (algo muy fácil porque su cruda ya lo estaba atormentando) y luego se puso la mano en la cabeza como si estuviera mareado. Siguió haciendo operaciones en la computadora y después se agarró de una separación de plástico antes de dejarse caer hacia un lado. Entonces la gerente dejó lo que estaba haciendo para atender a su empleado.
Su actuación fue muy buena, pues incluso se golpeó un poco la cabeza sin lastimarse, forzó su respiración durante unos minutos y no respondía a quienes le hablaban. En serio, ¿dónde quiere que le pongamos su Óscar?
¿Cuál es la mejor manera en la que lograste salir del trabajo ‘enfermo’? Esta es la mía. Era el día de San Esteban. Tenía resaca, 18 años y quería salir más temprano, así que decidí llevarlo a cabo. Llorando y con gritos, me aseguré de que el gerente también estuviera allí.
Su plan funcionó a la perfección. Lo dejaron descansar un momento, le dieron gratis una bebida Lucozade y una barra de chocolate Galaxy para que se recuperara, y luego lo enviaron a su casa, donde pudo dormir el resto del día para descansar la resaca.
Un año y medio después decidió publicar el video y su confesión. Entonces la gerente y sus compañeros supieron que los habían engañado, pero ya había pasado mucho tiempo y lo tomaron con humor. Su publicación se hizo viral en las redes sociales por su originalidad.
Obviamente no le iban a dar el título del empleado del mes, pero con su dramatismo y buenos cálculos para fingir un soponcio sin herirse deberían, al menos, darle un premio a la actuación.