“Norman, pero qué galán”. Ante la crisis energética que atraviesa Europa debido a los conflictos entre Rusia y Ucrania, la ministra de ambiente en Suiza ha recomendado a los ciudadanos bañarse juntos para ahorrar gas y energía. A lo cual, muchos han atendido, pero otros se han visto ofendidos.
Simonetta Sommaruga ha dicho en conferencia de prensa que recomienda a las parejas jóvenes bañarse juntas para ahorrar energía, pero que se trata de una práctica que no deben hacer los más grandes ni todos los ciudadanos. Por esto ha recibido críticas y la ironía de los medios locales.
Algunos periódicos se burlan de esta propuesta y dicen que para ahorrar energía, los suizos deberían tener relaciones en la mañana para no prender la calefacción. Estas medidas fueron propuestas por la ministra ante la inminente llegada de la temporada invernal, que suele ser cruda en los países europeos.
Apaguen la computadora cuando no la usen, apaguen las luces o dúchense juntos. La sugerencia era para los jóvenes, porque después de una cierta edad, ducharse juntos no es apto para todos.
Aunque las burlas no han tardado en aparecer frente a sus declaraciones, Simonetta asegura que se trata de un plan bien pensado que puede ahorrar el 15 por ciento del consumo de energía en el país, pues se encuentran dependientes del gas suministrado por Rusia a otros países como Alemania, a quien compran el fluido.
Además, la ministra ha recomendado apagar las luces cuando no se estén usando, así como las computadoras. Esta es una estrategia de ahorro que ya se había implementado en 1985, cuyo eslogan fue: “Menos desperdicio y el doble de placer”. Lo que sí es claro es que todos debemos decrecer nuestro uso de energía, ser más responsables y, de paso, por qué no, darnos calor humano.
