Adrián es un niño de 8 años que sufre Sarcoma de Ewing. Actualmente está luchando por su vida, pero tiene un sueño por realizar si llega a sobrevivir: ser torero. Él es como muchos otros niños que padecen cáncer (internet se conmueve con ellos e incluso se une para apoyar); no obstante su pasión es la tauromaquia, y aunque eso ha puesto en conflicto al mundo, ha recibido el apoyo de importantes toreros como El Soro, Ponce, Vicente Barrera, Rafaelillo, Ginés Marín, Román y Fernando Beltrán; incluso hubo una corrida benéfica organizada por su padre. Sin embargo, la pregunta que surge entre los usuarios con su caso es: ¿una persona que defiende y apoya las corridas de toros –no importa cuál su edad– tiene el mismo derecho a vivir?
La historia de superación de Adrián conmovió al mundo de la tauromaquia, pues la máxima ilusión del pequeño Adrián era verse rodeado de sus héroes: los toreros.
Este pequeño se apoya en el toreo para darse ánimos.
Las sesiones de quimioterapia lo envenenan; no obstante, su enfermedad no le impide hacer una vida normal. Y ahora que acaba de ver cumplido su sueño de poder acompañar a sus ídolos, se siente mejor.
“Aprendí a torear de salón viendo las corridas en la tele”.
Ante la noticia de su enfermedad, su pasión, y el evento benéfico, los animalistas fanáticos expresaron su opinión (¿su odio?) en redes sociales; y aunque el debate fue acalorado, entre todas las opiniones resaltó la siguiente…
Una antitaurina, cuyo nombre de usuario en Facebook es Aizpea Etxezarraga, publicó:
“Yo no voy a ser políticamente correcta. Qué va. Que se muera, que se muera ya. Un niño enfermo que quiere curarse para matar herbívoros inocentes y sanos que también quieren vivir. Anda yaaaaa! Adrián, vas a morir”
Sin embargo, cuando internet hizo eco de esta publicación, su perfil de pronto desapareció, e incluso borró su cuenta de Twitter.
Así mismo, otro tuit, de un usuario llamado Manuel Ollero, y cuyo perfil también cerró, expresó lo siguiente:
“Qué gasto más innecesario se está haciendo con la recuperación de Adrián, el niño este que tiene cáncer, quiere ser torero y corta orejas”.
Denunciarán a quienes desearon la muerte del niño
Por ahora, la Fundación Toro de Lidia emprenderá acciones legales en contra de quienes hayan publicado en redes sociales comentarios ofensivos y de odio contra Adrián. Para ella, el hecho “es denunciable” y tomará medidas legales.
Por su parte, Eduardo Hinojosa, padre de Adrián, también está estudiando la posibilidad de emprender acciones legales “a nivel particular” en contra de los animalistas que han deseado la muerte de su hijo.
“Lo que pedimos por mi parte y por parte de la familia es que se haga justicia y que de una vez por todas dejen tranquilos a la gente que amamos el toreo”.
