Tener una carrera universitaria no es algo sencillo, pues se requieren muchos años de estudio, desveladas y horas de dedicación. Pero para algunas personas, las condiciones no son las mismas, ya que las condiciones económicas pueden no estar a su favor, por lo que tienen que buscar un trabajo con el que puedan solventar sus gastos mientras llevan sus estudios.
El sueño de Kevin Núñez era convertirse en piloto aviador y pudo graduarse de una academia debido al esfuerzo y los horas de estudio, pero también a su trabajo como bailarín en las calles de Perú, donde se ganó la simpatía de muchos y se volvió un ícono del ritmo y la vida alegre en la ciudad. Hoy sigue sus dos pasiones, pues el baile también le ha abierto muchas puertas.
Kevin es venezolano y se volvió conocido en el centro de la ciudad de Lima, Perú, después de que se mudó al país andino para llevar sus estudios en aviación comercial. Para generar algo de ingreso extra, el joven comenzó a bailar en las calles. El merengue y la salsa son los géneros por lo que más se le recuerda a este esmerado bailarín. El joven se hizo muy conocido, llamando la atención de varias cadenas televisivas que lo entrevistaron.
De igual manera, debido a su popularidad, pudo ganarse una beca en Professional Air, donde cumplió su sueño de graduarse como piloto comercial. Kevin llevaba sus clases a la par que salía a bailar a las calles para ganarse algo de dinero para solventarse a él y su familia, que incluye a su pequeño hijo Nael y a su esposa, a quien considera otro de sus éxitos.
Yenderly Barreto, la esposa de Kevin, lo conocía sin saber que él era famoso, pero tuvieron sus primeros encuentros bailando en Perú. Ahí comenzó su historia de amor, que se fortaleció con la llegada del pequeño Nael. Ella conoce el lado más humano del bailarín y asegura que, a pesar de tener un carácter fuerte, es muy alegre y siempre está bailando.
Kevin, a quien su talento lo llevó a participar en concursos televisivos de baile como El gran show con Gisela Valcárcel, está en búsqueda de un ingreso extra para completar su horas de vuelo y salir en búsqueda de una aerolínea interesada en contratarlo con todo y su ritmo, con el fin de seguir con sus sueños de navegar en el aire.