No creo que sea necesario que se los diga, simplemente porque es una práctica rara y poco ética, pero el canibalismo es algo asqueroso. No sólo eso, resulta que masticar el brazo, la pierna o la cara de otro ser humano le puede hacer daño a tu cuerpo.
¿Por qué? Bueno, la carne humana se clasifica como carne roja, pero debido a la mioglobina en nuestros músculos es peligroso comerla, debido a los priones, que son partículas con características patológicas.
Hasta hace unos 50 años, en Papua, Nueva Guinea, se hacía esta practica por un grupo de personas, llamados los Fore, quienes se comían a sus seres queridos una vez que estos morían.
Pero, como resultado de este consumo, muchas personas desarrollaron kuru (que significa “temblar de miedo”), también conocida como la ‘enfermedad de la risa’.
Esta afección es un trastorno neurodegenerativo muy raro e incurable, causado por una rara proteína que se encuentra en la carne humana – priones que sobreviven al calor.
Los priones causan devastación, matando las células nerviosas en el cerebro y convirtiéndolo en una esponja llena de agujeros. Si desarrollas la enfermedad es probable que mueras dentro de un año.
Las partes del cuerpo que son más propensas a trasmitir la enfermedad son el cerebro, la médula espinal, la médula ósea y el intestino delgado.
Cuando la enfermedad explota, la variedad de los síntomas se pueden visualizar incluso en la pérdida de la coordinación (hasta el punto de parecer borracho), temblor incontrolable y parálisis del rostro. En última instancia, las víctimas se asfixian o mueren de hambre ya que los órganos internos también se paralizan.
Esto me recuerda a aquella vez que un reportero de CNN hizo una cobertura de la secta caníbal de los Aghori, donde el conductor hizo un ritual donde mancharon su rostro con las cenizas de los cuerpos, le pidieron que usara una diadema hecha de dientes humanos y beber de un cráneo. Pero todo dio un giro inesperado cuando el conductor comió sesos humanos.
Así que ya lo saben, la carne humana es peligrosa para la salud.
