Esta es una nueva teoría para todos aquellos afectos a las teorías conspiracionales. Internautas se han estado preguntando si el Denver International Airport, construido en 1995, en Estados Unidos, es más de lo que parece y oculta un súperbunker subterráneo. Creen que ha alojado a aliens y reptilianos, además de alojar el búnker del gobierno, especial para el Apocalipsis.
En 1993 todo el mundo creía que el aeropuerto en Denver estaba perfectamente bien, pero de cualquier forma, la ciudad anunció que construiría uno nuevo ubicado “convenientemente” a 25 millas de distancia de Denver. Y además, no tendría más pistas que el anterior.
Las protestas no se hicieron esperar de parte de los contribuyentes. El aeropuerto tardó 16 meses en ser construido y costó 2 mil millones de dólares. Las preguntas tampoco se hicieron esperar y todo mundo se cuestionaba a dónde había ido a parar ese dinero, y por qué el aeropuerto era tan grande.
Hay muchas otras preguntas, pero la principal fue ‘¿por qué es tan grande y por qué tiene un sistema subterráneo tan amplio?’. Los conspiracionistas creen que hay muchas pistas si se pone atención.
Los teóricos de las conspiraciones opinan que lo que hay debajo del aeropuerto se extiende por varias millas de profundidad. La más popular de sus teorías dice que hay un camino secreto que lleva a Washington DC.
Otros incluyen la idea de que aliens o reptilianos viven ahí abajo, o que es un búnker para el Apocalipsis. Aunque algunas son muy inverosímiles, otras no lo son tanto, sobre todo porque al parecer hay mucho espacio bajo el suelo que no es solamente el sistema de transporte y almacenamiento de equipaje.
Además, no ayuda que haya una placa agradeciendo a la Comisión del Aeropuerto del Nuevo Mundo por construirlo. Realmente parece que esa placa es el pretexto perfecto para los teóricos de las conspiraciones.
¿Por qué el gobierno o el Orden del Nuevo Mundo eligieron el aeropuerto de Denver? Seguramente por su localización céntrica y porque puede encubrir muy bien su verdadero propósito.
Los internautas ven por ejemplo, en los murales de ese aeropuerto, serios motivos para pensar en la conspiración. Normalmente los aeropuertos tienen murales que reflejan algo importante en la Historia de la ciudad o el Estado, pero no es el caso de este aeropuerto.
Decidieron encargar distintas decoraciones. Como si se preguntaran: “¿qué les parece si mejor ponemos niños muertos y en general escenas del Apocalipsis?”.
Las preguntas que surgen cuando contemplan una obra de arte como esta, por lo menos son las siguientes: ¿Es un nazi con una arma en cada mano? ¿El nazi está atravesando una Paloma de la Paz? ¿Son niños los que aparecen como muertos en ladrillos? ¿Se ve una fila de mujeres llorando y cargando bebés muertos?
No solo hay esa, están estas otras:
Además, los conspiracionistas llaman la atención sobre Blucifer, la escultura en la entrada del aeropuerto. Blucifer es un corcel con los ojos encendidos que mide 32 pies de alto.
Los teóricos de las conspiraciones creen que representa el cuarto jinete del Apocalipsis, y que está maldito. Esto está alimentado además por cómo murió su escultor, Luis Jiménez. La escultura, que tardó 10 años en esculpir, lo aplastó contra una estructura metálica que lo atravesó.
La gente se pregunta ¿por qué el aeropuerto elegiría esta pieza tan fúnebre para su exposición? Hay tres teorías: el artista sabía la intención de los constructores y lo dejó en claro en la escultura; la organización secreta se mofa de la gente; el arte es inexplicable.
Por lo pronto, estas preguntas permanecerán sin respuesta, esperemos, antes de que llegue el Apocalipsis.
