La pobreza puede limitar en algunos momentos, pero si se le pone habilidad y mucho corazón se puede sacar adelante a un hijo, supliendo las carencias con creatividad, como nos demuestra el padre de NY Keng, un niño de Camboya que no tenía una mochila para ir a la escuela.
En ese país, una mochila simple cuesta 7 dólares, y la situación económica de algunos es tan apremiante que no pueden pagar esa cantidad; menos cuando el trabajo como granjero no te deja grandes ganancias.
Sophous Suon es la maestra de este pequeño de 5 años, y no dejó pasar la oportunidad de compartir a través de redes sociales lo que el creativo padre hizo para que su hijo lleve sus útiles a la escuela.
Utilizando rafia azul, el padre puso lo mejor de sus habilidades manuales y le tejió una bonita mochila con la que su hijo puede transportar sus libros y no abandonar la escuela, y es que aunque a veces parezca increíble, hay millones de personas en el mundo que no cuentan con lo indispensable para vivir, y comprar un artículo de estos representa un lujo.
La maestra señaló:
La gente dijo que es un padre amoroso, conmovedor, genial y creativo. Me encanta esta bolsa.
Como suele suceder en estos casos, algunas personas que todavía conservan un buen corazón se apuntaron para apoyar a la familia, lo que siempre nos brinda esperanza en que la humanidad no está perdida del todo, y en que las redes sociales tienen también un uso que sirva para algo más que la diversión.
Sophous comentó:
Algunos extranjeros solicitaron el contacto para enviarles la mochila y el líder de la escuela se los envió.
Será cuestión de horas para que la ayuda empiece a llegar, y ojalá que no sea solo con mochilas, porque para eso el padre ya lo resolvió, sino que se les apoye para satisfacer otras de sus necesidades, como puede ser de alimentación, ropa y calzado.
Cuando crezca NY Keng estará orgulloso y agradecido con el esfuerzo de su padre.
