Debido a la pandemia de Covid-19, en varios países ya se hizo el anuncio de que el regreso a clases para el nuevo ciclo escolar no será de forma presencial, sino a distancia, por el riesgo de contagio que todavía existe; pero esto implica un gran problema, ya que no todos los estudiantes tienen acceso a internet y tampoco a una televisión, por lo que se requiere de alguien que pueda apoyarlos.
Lino Sonders Rojas es un maestro en las zonas rurales de Perú, donde la necesidad económica, la accidentada geografía y lo alejado de las comunidades y viviendas causan que no haya conexión a internet y que muchos de los hogares de sus alumnos no cuenten con una televisión para poder seguir las clases virtuales. Sin duda, se trata de un hombre comprometido con su labor, por lo que ya es considerado un héroe.
Trabaja en Chachapoyas, en la región amazónica de Perú, y para que sus alumnos no se queden sin estudiar organizó una campaña de recolección de televisores, para que le donaran aparatos que las personas ya no usan y con los que los niños para que puedan acceder a los contenidos del Programa “Aprende en Casa”, que aplica el gobierno peruano como alternativa para continuar con las clases a distancia ante la cuarentena y el distanciamiento social que la pandemia impone.
Por fortuna la respuesta fue favorable y Lino pudo reunir una buena cantidad de televisiones, y él mismo se encargó de llevarlas a cada uno de los hogares de sus alumnos más necesitados. Las instaló y se aseguró de que estuvieran funcionando correctamente, con lo que los pequeños se pondrán al corriente con sus clases.
El acceso a los medios de comunicación masivos debería ser un derecho fundamental para nuestros estudiantes.
—Profr. Lino Sonders Rojas, maestro rural peruano, a través de Facebook
Dentro de toda la desgracia que ha traído la pandemia de coronavirus también han surgido historias de verdaderos héroes sin capa, como este maestro, quien pone todo su esfuerzo para que sus alumnos tengan la oportunidad de seguir estudiando y así algún día puedan acceder a mejores oportunidades. Un aplauso para quienes luchan por los demás en los hospitales, pero también a quienes como Lino lo hacen desde otras trincheras.
