Dwayne La Roca Johnson ha librado la lucha más complicada de su vida, y no fue en el ring o en el cine. Ya que recientemente compartió algunas palabras inspiradoras para animar a otros a que también luchen con la depresión, según contó en la red Oprah Master Class:
“Me di cuenta de que con la depresión una de las cosas más importantes que debes sentir es que no estás solo. Uno no es el primero en entrar en depresión, y no seremos los últimos en pasar por ella. Me gustaría tener a alguien en ese momento que me pudiera jalar hacia el otro lado y que me diga ‘hey, todo va estar bien. Va a ser bueno'”.
Según cuenta, Johnson tuvo problemas con la depresión desde hace 20 años, cuando su carrera futbolística comenzó a tambalearse. Cuando Dwayne Johnson estaba en su último año en el futbol colegial y tenía un futuro en la NFL, una lesión en la espalda lo dejó en la banca.
Tuvo que conformarse con jugar en el equipo de Calgary de la Liga Canadiense de Futbol, pero fue despedido tras dos meses. Sin trabajo y deprimido, regresó a Miami. En el camino, vació sus bolsillos y solo encontró siete dólares.
Después de tener 23 años y vivir con sus padres en un pequeño apartamento, fue un golpe en un punto bajo real:
“Te sientes como si estuvieras solo. Te sientes como que eres solo tú. Estás solo en tu burbuja”.
Y fue después de la decisión de dejar el fútbol que Johnson dijo que comenzó a construir una nueva vida para sí mismo, ahora como un luchador profesional. Con la ayuda de su padre, quien también fue luchador profesional, Johnson iba a convertirse en la superestrella de la WWE conocido como La Roca.
En una serie de monólogos íntimos publicados por Johnson, ha revelado mucho sobre su vida personal. En otro clip de “Master Class”, el luchador convertido en actor describió cómo a la edad de 15 años, le salvó la vida a su madre. También se abrió sobre su relación con su hija y sobre la filosofía detrás de su personaje como The Rock.
“Esto terminó siendo uno de los grandes capítulos de mi vida”.
En esta aparición en el canal de Oprah, reveló que permaneció cerca de un mes y medio en ese pequeño departamento con sus padres, “solo limpiando”, hasta que sonó el teléfono. Era el entrenador del equipo que lo había despedido, ofreciéndole regresar. Sin embargo, dijo no.
El entrenador le dijo: “estás tirando todo a la basura. Este es el peor error que puedes cometer. Estás arruinando tu carrera”. Y la respuesta de Dwayne fue: “siento en mi corazón que debo hacer esto”. Luego le pidió a su padre que lo entrenara.
La vida plantea siempre decisiones, hasta en lo mínimo, y como ya lo vimos con La Roca, hay que tener esa fortaleza para dejar ir algunas cosas y aventurarse a descubrir lo que hay del otro lado de la tristeza y los malos momentos, guiados siempre por lo que nos dicta el corazón.
“Espera a que la calidad fundamental de la fe actúe. Hay que tener fe en que del otro lado del dolor hay algo bueno”.
