¿Quién no tuvo un crush con su maestra? Si te perdiste esa parte infaltable de tu niñez, las redes sociales te dan la oportunidad de sentirte de nuevo como un peque y enamorarte al 100 por ciento de la maestra que ya ha cautivado a los internautas con su candor y ligereza.
La profesora rural Maya Corona ha compartido sus experiencias dentro del aula con los internautas y su humor, así como su chispa sirven para recordarnos los tiempos de escuela, cuando también teníamos que lidiar con el día a día de aprendernos las tablas y jugar en el patio escolar. Según su propia versión, es profesora de la tarde, directora y está haciendo su posgrado, pero tiene tiempo de compartir su día con sus seguidores.
Cosa de (buena) rutina
Los videos de la cuenta de TikTok de Maya Corona muestran el modo en que los chicos interactúan con ella y entre sí dentro de las instalaciones de la escuela. ¿Y cómo va la dinámica con los morrillos? Pues todo relax, aparentemente, la actitud relajada y amable de la maestra no es solo pose para sus redes sociales.
Maya Corona trabaja con ánimos y comparte ese impulso por sus redes sociales, para que sus ya decenas de miles de seguidores puedan sentirse como “parte de la clase”, aunque estén lejos y no les toque disfrutar de los limones y mangos que presume en sus videos dado que es una escuela rural donde esos productos son cultivados.
Sana convivencia
Bien trabados, los morrillos con las bromas de la maestra. Ahorita le hacemos una plana. pic.twitter.com/UPBEVaqzjR
— tacodealacran (@tacodealacran) October 5, 2022
Mientras habla con sus alumnos, la profesora Maya no lo hace de modo autoritario y el ambiente en su salón es más bien de convivencia con los pequeños que de autoritarismo, pues se presta a que la interacción entre profesora y alumnos sea más grata.
Jugando con sus alumnos, como si fuera una de ellos, Maya Corona le entra a las dinámicas de grupo. Además, como si fuera una más de la clase, se une a chicas y chicos en sus juegos, se ríe con ellos y hasta encuentra dificultades para “castigarlos”, pues enseguida se le presenta la interrogante “¿por qué?” de sus inquisitivos estudiantes, que no se dejan si no es justo.
Haciendo la chamba… con ritmo
Con esa maestra sí dan ganas de formarse a entregar la tarea. pic.twitter.com/ymghCnMElg
— tacodealacran (@tacodealacran) October 5, 2022
La vocación se nota en la actitud y cuando hasta remover el periódico mural se vuelve motivo de celebración, poco hay que dudar en cuanto a quién disfruta realmente su trabajo y quién lo tiene que soportar para llevar la papa a la casa.
Así, Maya no tiene nada que ver con los profes que nomás se presentan para sorber su taza de café mientras miran hastiados el salón lleno de alumnos, solo soñando con el momento en que la campana de conclusión a un día de suplicio. Nada de eso ocurre en la clase de la profesora Maya Corona.
Tiempos de recreo y humor: lo profesional y lo privado
Usted haga todos lo cambios que necesite. Hasta el plan educativo le damos chance que lo modifique. «Y 'ámonos a encuerarnos». pic.twitter.com/X3foT569MP
— tacodealacran (@tacodealacran) October 5, 2022
No solo comparte sus momentos en el aula, sino que la profesora también comparte parte de su día a día en el gimnasio y su deseo de superación en el ámbito personal, para mantener la salud y “la buena forma”. De lo que no cabe duda es de que tiene encanto.
Desde su vida profesional, su relación con los alumnos, sus esfuerzos por asistir día a día a sus obligaciones, manteniendo siempre el buen humor, así como la búsqueda de un modo de vida virtuoso y sano, la maestra rural Maya Corona realmente nos ha cautivado.